Foto: Cabb
Roly Dianda no escapa a las responsabilidades, no huye de las críticas ni deja de analizar los puntos flojos. Sabe que es el camino para mejorar. Por eso, desde la calma y el trabajo aceptó con naturalidad un rendimiento discreto en el debut ante Corrientes (que se ganó igual y bien) y se alegró con la mejoría del miércoles frente a La Rioja. Claro está, que el DT santafesino sabe que falta lo más complicado. Y lo explica en diálogo con Febasantafe.com.ar.
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“Sabíamos que por una cuestión de trabajo, a medida de que pasen los partidos el rendimiento del equipo iba a ser mejor. El partido ante La Rioja sirvió mucho porque ajustamos situaciones defensivas según la lectura que hicimos del primer partido y le dimos mayor fluidez a las ofensivas, porque el reflejo está en los números, ya que este equipo nos hizo 44 puntos cuando venía de anotar más de 80 y nosotros superamos los 88 de la primera fecha. Fue muy buena la producción”, explicó Dianda, que viene de ser campeón en 2016 con el Sub 15 de Santa Fe.
“El partido nos permitió rotar mucho el equipo, sacarle minutos a algunos jugadores que por allí estaban sobrecargados y darles confianza y tiempo a otros que no habían estado tanto tiempo en cancha”, amplió, para dejar una frase sobre el duelo ante Córdoba, que definirá el ganador de zona: “Son dos provincias fuertes, que van a pelear por el uno, y después veremos según diferencia de gol como terminamos en la general”.
Justamente los resultados de los otros grupos y la paridad de una de las zonas, hacen prever cruces tan duros como imposibles de anticipar. Y no parece que ser 1, 2 ó 3 sea garantía de nada: “Debido a lo que está pasando, sobre todo en la zona de Adeo, pueden darse cruces tremendos. Hay mucha incertidumbre. A lo mejor sale beneficiado el 2 o 3, la verdad que es una lotería lo que puede pasar”.
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