Ya se fue el ceño fruncido de la semifinal. Se nota la felicidad en el rostro y en la voz de los finalistas. Meterse en la pelea grande por el título suele tener un efecto liberador, el de cumplir el objetivo y saber que en un mano a mano cualquiera puede ganar, pero que el trabajo previo ha sido realizado. “Estamos bien, muy contentos, la serie ante Firmat fue muy dura, hubo nervios porque el camino fue complicado y queríamos llegar al objetivo planeado para la temporada. La victoria nos trajo alegría tras un año sufrido. Y ahora hay ansias por jugar la final, estamos disfrutando la semana tras un mes difícil”, explica Federico Giulianelli, el entrenador de Atlético San Jorge, y lo dice todo. Es que palabras como sufrir, nervios, duro o complicado no parecen pertener al vocabulario de un equipo que ganó casi todo lo que jugó en la temporada. Pero sí tienen que ver con las altas pretensiones que tenía y tiene el uruguayo.
Con respecto a la final que se viene, Giulianelli apuesta a virtudes propias y también a trabajar sobre falencias ajenas o al menos tratar de generarlas. “Tenemos que estar concentrados en defensa como estuvimos todo el año porque eso nos trajo hasta acá. Sacando el partido ante Firmat siempre dejamos a los equipos en 70 o menos y como tenemos facilidad en ofensiva para llegar a 80 o más, eso nos brinda confianza”, explica sobre San Jorge, pero también mira a Santa Paula: “Es un equipazo, que sabe a qué juega, con una localía muy fuerte que hace que sean muy importantes los partidos que se jugarán en San Jorge. Son intensos, se sienten cómodos defendiendo al límite y jugando el contragolpe. Quizás en el ataque fijo no se sientan tan cómodos, por lo que debemos ser efectivos para que ellos no puedan correr y tratar de que cuando ellos ataquen sea cinco contra cinco. Son un poco a grandes rasgos los objetivos que nos planteamos”.
Del otro lado también hay tranquilidad por haber superado una eliminatoria complicada, aunque ya la cabeza y los tiempos están puestos en la gran final que se viene desde este viernes.
“Obviamente estamos muy bien de ánimo porque pasamos una serie muy dura contra uno de los grandes candidatos y lo hicimos con un tercer partido contundente. Eso da confianza. El único que tiene una molestia es Emiliano Carpinetti, pero confiamos en que va a llegar bien al partido”, pasa el parte de situación Francisco Blanc desde el búnker de Santa Paula de Gálvez.
“Más allá del rival y de lo táctico que estamos trabajando con el scouting y las reglas defensivas, será importante mantener la intensidad en defensa que nos hizo estar arriba en el torneo. En los primeros juegos de la serie ante Sport no pudimos hacerlo y lo pudimos corregir en el tercero. Contra Sport ya sabíamos contra qué nos íbamos a encontrar, que ellos iban a congestionar la zona pintada y a darnos el tiro de tres puntos. Pero no sabemos qué va a plantear San Jorge, así que estamos trabajando sobre lo que pensamos que pueden hacer. Y tenemos que terminar de insertar en la idea a Brian Díaz, que ha tenido pocos entrenamientos con el equipo”, explica al detalle el entrenador del Azul, quien analiza esta vocación de su equipo por el juego rápido, de posesiones cortas: “Por característica e intensidad nosotros queremos forzar correr el ataque todo el tiempo. Los scoutings y la ocupación de espacios de la defensa hoy te obligan a jugar a una velocidad mayor. En la serie contra Sport sabíamos también que a ellos les incomodaba esa forma y por eso se vio tan marcado. Hoy sinceramente no sé qué va a proponer San Jorge, porque es un equipo con internos más atléticos. No sé si harán algo similar a lo de Sport, lo veremos con el correr de los partidos”.
“Nuestra filosofía es correr todo el tiempo y tenemos que respetarla. La idea es que tire el jugador mejor ubicado, encontrar las ventajas que da el rival cuando apoyamos la bola en el poste bajo. Después veremos que proponen ellos y si nos dan las acciones de uno contra uno, los puntos en la pintura o las descargas para encontrar los tiros en el lado opuesto”, cerró Blanc.
Los estrategas dijeron lo suyo. Resta muy poco y se verá qué pasa en el rectángulo.
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